Cuando te vi en alquel bosque encantado, un duende dijo que tu eras mi príncipe azul, como si fuera por arte de magia, llenaste mis días de luz

Te amo con todo lo que soy y un poco más.

Juzgué tantas cosas de vos en algún momento, me llenaron tanto la cabeza, nos distanciamos tantas veces y hoy después de ocho años me doy cuenta que sos la persona que nunca dejó que me cayera, que nunca me dejo sola, estuviste siempre conmigo, en los peores momentos vos fuiste la que estuvo ahí, en los mejores momentos también estuviste, en los momentos de nervios, que ya no sabía que hacer, que pensaba que se me venía lo peor, también estabas ahí, conmigo, acompañándome siempre. Te debo gran parte de lo que soy mejor amiga, creo que además de divertirnos y acompañarnos siempre también maduramos juntas, dejamos de lado las cosas que ya no tenían tanta importancia y nos empezamos a dar cuenta que algunas personas valían la pena y otras… bueno, otras no. Gracias por todo, en verdad no sería la misma hoy sin vos, fuiste mi compañera en todo desde los siete años y quiero que lo sigas siendo toda la vida. Perdón si alguna vez hice o dije algo que te pudo lastimar, sabes como soy y como soy cuando me enojo o algo me molesta no puedo controlar las cosas que digo, pero sabes que lo último que haría es intentar lastimarte o hacerte sentir mal. Te amo con todas mis fuerzas, sos mi mejor amiga, esa amiga que elijo como hermana del corazón, esa amiga que no quiero perder nunca en mi vida.

Me quiero ir bien LEJOS DE TODO.

No quiero otros besos, ni otros abrazos, ni otro número de teléfono que me mande mensajes. Porque me encanta tu sonrisa, la adoro. Adoro tus abrazos y tus locuras. Me encanta que me hagas reír. Me gusta cuando me miras y cuando sonríes sin ninguna razón. Adoro que me hagas tus típicas bromas, aunque me enoje y creas que las odio. Adoro tu forma de hablar, tus gestos. Me encanta estar con vos, porque se me olvida todo.  Simplemente gracias por hacerme pasar y hacerme sentir momentos hermosos e inolvidables.